Durante el primer trimestre de 2015 las ventas de celulares llegaron a 2.210.689, según informó la consultora mundial IDC, la principal firma de inteligencia de mercado, servicios de consultoría y conferencias para los mercados de Tecnologías de la Información y Telecomunicaciones.
“De acuerdo al IDC Chile Smartphones Tracker Q1 2015, la variación, de tan sólo 31.482 equipos, en comparación a 2014, se debe a que el mercado está llegando a tasas de penetración del 100% de la base instalada. Por lo tanto, el recambio de un teléfono no inteligente a uno inteligente cesó, provocando que el mercado se mantenga estable”, explicó Cristián Peña, analista senior de dispositivos móviles de consumo de IDC Chile.
Otro factor importante es el alza en la venta de smartphones de gama alta -portátiles con un precio mayor a los USD$700-, los cuales registraron ventas cercanas a los USD$148 millones. Un aumento de 137%, en comparación al 2014, lo cual va de la mano con el alza del dólar registrado durante este último tiempo.
En tanto, la inversión en smartphones de gama media alcanzó los USD$153 millones en el primer trimestre de 2015, un incremento del 6,8% en las ventas realizadas durante el mismo periodo del año pasado. Teniendo en cuenta estas variables, en IDC esperan que en 2015 se comercialicen un total de 9.200.000 celulares, entre smartphones y feature phones -equipos sin sistema operativo-, con una baja del mercado de sólo 3%.
En el ámbito de las tablets, durante el primer trimestre se vendieron 213.354 de estos dispositivos, mostrando una baja del 57%, en comparación a 2014, cuando las ventas alcanzaron las 492.813 unidades.
Para Cristián Peña, este fenómeno se da por dos factores; por una parte, el boom ligado a la llegada de estos productos ya pasó, por lo que su masa de consumidores disminuyó considerablemente.
Además, la oferta no ha variado, ya que sólo existen dos líneas de productos, aquellas que se sitúan bajo los $100 mil y los modelos de gama alta, por lo que los usuarios de ambos tipos de dispositivos no tienen interés de renovar, ante la inexistencia de nueva oferta en ese ámbito.
